María Oliva Aristizábal de 64 años fue asesinada, al parecer, por su propio hijo quien se encontraba en estado de embriaguez, según lo anunciado por las autoridades. La víctima sufrió el impacto de un disparo a la altura del lado derecho del cuello en la vereda Popalito de esa localidad del norte del Valle de Aburrá.

Según el reporte, la herida se la ocasionó su propio hijo en estado de embriaguez cuando manipulaba una escopeta que se disparó, al parecer, accidentalmente. La mujer, fue llevada de inmediato al hospital San Vicente de Paúl de Copacabana, y de inmediato fue remitida a la Clínica del Norte en el municipio de Bello, donde finalmente falleció.

El acusado del “homicidio” se presentó en el hospital San Vicente de Paúl sin el arma implicada en los hechos, ante la policía que presenciaba el lugar, motivo por el cual fue dejado a disposición de las autoridades competentes.

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